Compra inteligente: los 5 consejos imprescindibles

Si, es posible que penséis que soy una cansina y que me repito como el ajo pero es que es fundamental leer las etiquetas a la hora de hacer la compra para evitar llegar a casa y darnos cuenta de que lo que hemos traído del súper no se le puede llamar alimento ni con toda la buena intención del mundo..... y encima nos ha costado dinero.
Así que para estar completamente convencidos de que no nos han
dado gato por liebre ahí van unos consejillos que al menos a mi me funcionan:
1- Cuanto más natural y menos envoltorios haya, mejor.
Si compro un brócoli no hay nada que leer ni que "entender". Es natural, sencillo y saludable.
Si compro brócoli congelado deberé leer la etiqueta para ver que efectivamente el paquete lleva brócoli. Nada más.
Si me decido por algo más procesado como unas verduras salteadas congeladas, en la etiqueta debería de constar que tipo de verduras contiene, hierbas aromáticas, en caso de que las lleve y ya está.
Y así sucesivamente.
Lo que nos lleva al punto 2
2 - Si no sabes exactamente lo que contiene no lo compres (por muy apetitoso que parezca!).
La información de los ingredientes debe ser clara de forma que todo el mundo entienda que es eso que estamos comiendo. Entre otras cosas por el tema de las alergias.
Si no sabes lo que es no lo comas.
Si la lista de los E es enorme no lo compres.
Cuanto más conservantes, acidulantes, espesantes, colorantes, potenciadores del sabor y muchas más cosas que podemos encontrar, lleve el producto más desnaturalizado y procesado está y toda esa porquería te la vas a comer tú.
3- No existen los productos "sin azúcar".
Si me compro un helado espero que sea dulce y si veo que se anuncia como "bajo en" o "sin azúcar" o estoy en una tienda ecológica donde es posible que entre los ingredientes se encuentren dátiles o siropes naturales o están sustituyendo el azúcar por cosas como sacarinas, aspartamo (uno de los más perjudiciales para la salud), sucralosa, jarabes, etc., que es casi peor que el azúcar convencional. Además estos productos "bajos en azúcar" suelen tener mucha más grasa saturada que los "normales".
4- Los productos "light" o bajo en grasa son una estafa.
Y de las grandes.
En primer lugar las grasas (saludables) son necesarias para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Están presentes en la formación de las membranas celulares, ayudan a sintetizar las vitaminas liposolubles, etc.
Además las grasas son las que nos aportan la sensacióon de saciedad y le dan a los alimentos el sabor.
Por eso, por regla general, las dietas bajas en grasas no se sostienen en el tiempo, porque nos dejan como a medias, insatisfechos.
Aprender a comer es mucho más lógico, saludable y divertido.
Pero bueno ese es otro tema del que quizá hable en otro momento.
Para hacer un producto "light" apetecible la industria alimenticia compensa la falta de grasa con más azúcar y/o sal. Es decir, quitamos de un sitio para poner en otro.
Comprobadlo vosotras mismas. Coged por ejemplo un queso untable en su versión light y normal y ya me decís que habéis descubierto!
5-Por último pero no menos importante por favor, llevad una lista de la compra.
Si vas al supermercado con hambre y sin saber qué necesitas, irás como pollo sin cabeza de pasillo en pasillo y muy posiblemente acabes comprando algo a lo que no se puede llamar alimento.
Porque seamos sinceros, si yo voy a comprar con el estómago vacío no me apetece precisamente comprarme una coliflor sino algo que me quite el hambre ahora mismo, que pueda abrir y engullir y esa, querid@s mí@s, no suele ser la opción más saludable.
Si yo voy a comprar sabiendo lo que necesito y voy al grano, seré más rápida, ahorraré dinero y encima mi cuerpo, ese que me acompaña a todas partes, me lo agradecerá infinito porque seguramente no caeré en la tentación de comprar algo de lo que luego me arrepienta.
Asi que no nos dejemos engañar, seamos listos y realicemos nuestra compra de forma consciente e inteligente.
Espero haberte inspirado
Con amor
Cristina